Tu viaje comienza con una recogida en el aeropuerto de Casablanca. Nuestra primera parada es un icono moderno: la majestuosa Mezquita Hassan II, la más grande de Marruecos, situada frente al océano. Continuamos hacia la capital, Rabat, para visitar los históricos monumentos de la Torre Hassan y la encantadora Kasbah de los Oudayas. Desde allí, ponemos rumbo a las montañas del Rif para llegar al atardecer a Chefchaouen, la fascinante ciudad pintada de blanco y azul, donde pasarás la primera noche.
Tras desayunar en la calma azul de Chefchaouen, nos dirigimos al sur. Nuestra primera parada importante son las impresionantes ruinas romanas de Volubilis, un vasto yacimiento arqueológico con vistas panorámicas al valle. A continuación, exploramos Meknes, la ciudad imperial, donde descubriremos sus murallas monumentales y visitaremos la tumba de Moulay Ismail. Después de almorzar aquí, el camino nos lleva directamente a Fez, donde cenarás y te alojarás en un riad tradicional en la medina.
Dedicamos el día completo a explorar Fez, la más antigua y fascinante de las ciudades imperiales. Con un guía, te adentrarás en Fez el-Bali (la ciudad vieja), un laberinto medieval declarado Patrimonio de la Humanidad. Visitarás la exquisita Medersa Bou Inania, los alrededores de la Mezquita Kairaouine y los bulliciosos zocos llenos de artesanía. Por la tarde, explorarás Fez el-Jdid (la ciudad nueva) y el Museo de Artes Marroquíes. Noche en el riad.
Salimos temprano de Fez (8:00 h) hacia el sur. Cruzaremos el Atlas Medio, parando en Azrou para ver a los monos de Berbería en su bosque de cedros. Almorzaremos en Midelt, a los pies del Monte Ayachi. El paisaje cambia drásticamente al descender por el puerto de Tizi-n-Talremt hacia el largo oasis del Valle del Ziz, salpicado de ksars (aldeas fortificadas). Pasando por Er Rachidia y Erfoud, finalmente llegamos al borde del Erg Chebbi. Te recibirán con un té y tendrás tiempo para un primer paseo por las dunas antes de una puesta de sol mágica. Cena, velada musical y noche en una jaima nómada.
Hoy vives una experiencia sahariana profunda. Tras el desayuno, emprenderás una caminata o paseo en camello de varias horas, siguiendo a los animales que llevan todo lo necesario. Tu guía preparará un almuerzo nómada tradicional directamente en las dunas. Disfrutarás de la inmensidad y el silencio del desierto durante todo el día, caminando unas tres horas por la mañana y tres por la tarde, antes de regresar al campamento para la cena y otra noche bajo las estrellas.
Madruga para vivir el espectáculo del amanecer sobre las dunas, un juego de luces y sombras inolvidable. Después, tendrás la opción de un último paseo en camello antes de partir hacia Tinghir y las impresionantes Gargantas del Todra, donde almorzaremos. Este cañón ofrece oportunidades para pasear junto al río y entre sus huertos. Continuamos nuestro viaje hacia el Valle del Dades, famoso por sus paisajes, donde pasaremos la noche en un hotel.
Por la mañana, un paseo por las Gargantas del Dades. Luego, tomamos una pista 4×4 hacia Boutarar para visitar a familias nómadas bereberes que aún viven en cuevas, compartiendo una taza de té con ellos. La ruta sigue por el fragante Valle de las Rosas (especialmente vibrante en mayo) y hace una parada en la hermosa Kasbah Amredil en Skoura. Finalmente, llegamos a Ouarzazate, la ciudad del cine, para cenar y alojarnos en un riad.
Visitamos el famoso Ksar de Ait Ben Haddou, Patrimonio de la Humanidad y plató de películas como Gladiator. Continuamos por un pintoresco valle hacia Telouet, la antigua residencia fortificada del último Pachá de Marrakech. Desde allí, afrontamos el tramo final: el cruce del Alto Atlas por el puerto de Tizi-n-Tichka, el más alto del norte de África, disfrutando de vistas espectaculares antes de descender a Marrakech al final de la tarde.
Día dedicado a explorar la “Ciudad Roja”. Podrás visitar, según tus preferencias, los Jardines Majorelle (con su icónico azul), la Mezquita Koutoubia, el lujoso Palacio Bahía, la histórica Medersa Ben Youssef y las Tumbas Saadíes. El corazón de la experiencia marrakechí late en la plaza Djemaa El Fna, un teatro al aire libre con encantadores de serpientes, cuentacuentos, músicos y decenas de puestos de comida que cobran vida al anochecer. Noche en tu riad.
Después del desayuno en Marrakech, emprendemos el viaje de regreso a Casablanca por la mañana, para que puedas tomar tu vuelo de conexión o de regreso a casa. Concluye así este increíble viaje de 10 días, llevándote contigo los mejores recuerdos y las memorias imborrables de la esencia marroquí.
